domingo, 5 de julio de 2015

Cantando siempre cantando

Dianita desde que empezó a hablar empezó a cantar, con compartirles que cuando se pusieron de moda las tablas de multiplicar en cassette, ella siempre debaja pasar las tablas y le encantaba escuchar, cantar, volver a escuchar y volver a cantar cada canción N veces, se aprendió a las mil maravillas todas las canciones que la cinta traía por lado y lado. Dios que esa muchachita tenía la energía para cantar todo el día,  hoy en día sigue cantandando, le encanta la música de habla inglesa y es así que a su propio modo aprendió a hablar inglés: cantando siempre cantando. En esta foto está con sus compañeros de la primera infancia: su nonito y su hermano mayor.



Cuando estuvo muy cerca  el parto mi amiga de infancia y colegio Rocio, me prestó un hermoso moisés en mimbre en el cual había acunado a sus dos hijos mayores, mi mamá trajo el toldillo hecho y el género para forrar el colchoncito y también me hizo las fundas y tendidos. Me encantaba mirarla en ese moisés parecia una princecita, se veía muy hermosa y ahì durmiò hasta los 4 meses cuando le compramos una cama-cuna en hierro ornamental rojo con dorado parecida a la de su hermano mayor.

 "Loquió" y brincó desde cuando aprendió a caminar, a pesar de lo cual no tuvo caídas graves, la única que tuvo fué ya grandecita como de 6 ó 7 y se abrió una ceja, afortunadamente no se le nota la cicatriz. Pero desde que pudo nunca se quedó quieta mucho tiempo.





Alguna vez fue la madrina del equipo de fútbol donde jugaba el papá, la escogieron porque siempre se reía a carcajadas, pero el día del desfile decidió poner cara seria todo el tiempo, yo creería que se asustó viendo tanta gente.



Alcanzó a ser fotografiada con su nonito Julio, un gran señor, esposo, padre y abuelo




Cuando le llegó la hora de sentarse a comer, aprovechamos para comprarles a ella y a su hermano mayor un comedor en madera y las sillas estaban hechas con "cuero" de vaca (pobre vaca).  Esas sillitas aguantaron el uso y el abuso, eran hasta carretillas donde Diana y su hermano se volvían "vendedores de bocachico..., pescado...pescado fresco".


Fue la adoración de su nonito Enrique a pesar de las pilatunas que le hacía cuando contestaba el teléfono pues siempre que llamaban al nono, ella contestaba: "mi nonito manda decir que no está" y cuando él empezó a decirle que asì no se contestaba y que le preguntara primero empezó entonces a preguntarle tan pronto levantaba el auricular: "nonito que digo que está o que no está?"

Siempre ha sido muy amorosa, atenta y servicial, ejerce su profesión también cantando y creciendo a todo nivel como la valiente guerrera que es y da sus mejores batallas día con día; feliz cumpleaños amada hija, te quiero con todo mi corazón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario