Estos días no han sido los mejores de vida, creería que tampoco los peores, sólo que algunas veces nos empecinamos en ver sólo el lado oscuro de la vida pues el dolor a todo nivel que te quema, te enloquece y te deja sin piso, ni norte a dónde seguir porque se acompaña de la tristeza que llega a la depresión, el miedo, el sufrimiento, el sinsentido de la vida, que ya sólo alzas la mirada para decirle al Padre: No soy capaz de más, por favor llévame contigo y mientras concédeme fortaleza y sabiduría pues estoy que salgo corriendo, pero no hay a dónde ir, sólo hacia ti. Encontré este poema de Teresa de Ávila ó Santa Teresa de Jesús que a más de hermoso habla por sí sólo.
Vivo Sin Vivir en Mí
Vivo sin vivir en mí
y de tal manera espero
que muero porque no muero.
En mí yo no vivo ya
y sin Dios vivir no puedo
pues sin Él y sin mí quedo
este vivir ¿qué será?
Mil muertes se me hará
pues mi misma vida espero
muriendo porque no muero.
Esta vida que yo vivo
es privación de vivir
y así es continuo morir
hasta que viva contigo.
Oye mi Dios lo que digo
que esta vida no la quiero
que muero porque no muero.
Estando ausente de ti
¿qué vida puedo tener
sino muerte padecer
la mayor que nunca vi?
Lástima tengo de mí
pues de suerte persevero
que muero porque no muero.
El pez que del agua sale
aun de alivio no carece
que en la muerte que padece
al fin la muerte le vale.
¿Qué muerte habrá que se iguale
a mi vivir lastimero
pues si más vivo más muero?
Cuando me pienso aliviar
de verte en el Sacramento
háceme más sentimiento
el no te poder gozar
todo es para más penar
y mi mal es tan entero
y muero porque no muero.
Y si me gozo Señor
con esperanza de verte
en ver que puedo perderte
se me dobla mi dolor
viviendo en tanto pavor
y esperando como espero
muérome porque no muero.
Sácame de aquesta muerte
mi Dios y dame la vida
no me tengas impedida
en este lazo tan fuerte
mira que peno por verte,
y mi mal es tan entero
que muero porque no muero.
Lloraré mi muerte ya
y lamentaré mi vida
en tanto que detenida
por mis pecados está.
¡Oh mi Dios! ¿Cuándo será
cuando yo diga de vero
que muero porque no muero?
Hasta la próxima queridos lectores, gracias por ser y existir. Un abrazo apapachador.
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