En este mes de junio se celebra el día del padre, bueno que bien porque yo tengo siempre que celebrar por partida doble, tengo dos papás por falta de uno jajajaja y lo mejor de todo es que los dos son amados y también me han amado como hija. He aquí la historia:
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| Imagen tomada de la página Rincón del Tíbet |
Como muchos niños, en nuestro país, nací como producto de una relación que no contemplaba una niña en el camino, pero como la vida es maravillosa todo se dió para que mi madre y mi padre biológico se conocieran y producto de esa relación que fué pasajera naciera yo. No se pudieron entender, pero "lo bueno" fué que hubo una "batalla campal" por la bebé recién nacida, lo cual con los años mirando en retrospectiva entendí que mi padre me amó, aunque la versión oficial, con desconocimiento del daño que eso podía causar, fué todo lo contrario, además acompañada de muchos "epítetos" en contra del pobre, quien también salió corriendo a registrarme y darme orgullosamente su apellido, todo lo cual hizo que yo llorara mucho y creciera muy triste porque no tenía papá, además creía que nunca me había amado y siempre esperé con mucha ansia que viniera a rescatarme, me abrazara, me protegiera y me dijera que me amaba, pero por supuesto eso nunca pasó y eso maltrata mucho a un niño y creería que más a una niña. Como las cosas, situaciones y personas son cómo son y no como nos hubiera gustado que fueran, no tengo ni una foto de él, entonces por eso no voy a publicar tampoco foto de mi "otro papá".
Con los años, estando yo aún muy pequeña, mi madre conoció a un hombre maravilloso, todo un señor, que sin ser perfecto, no me interesa contar sino algunas de sus virtudes como son la de ser muy culto, amante de la lectura, la buena música, la buena comida, buen comunicador, muy humano y en fin de todas las cosas que aportan cultura y buena formación en valores al ser humano, cuando por cosas de falta de afinidad se separaron con mi madre, yo quedé a su cargo por algún tiempo que terminó siendo el resto de vida, entonces por supuesto con él aprendí a hacer análisis con muy buena redacción y ortografía de las lecturas dominicales de un periódico nacional, escuchar música clásica, hablar bien, comportarme en público, saber cómo se mezclaba la comida y cómo se manejan los cubiertos en eventos protocolarios, que los valores no son negociables y muchas otras cosas que me ayudaron a ser una mejor persona, claro tengo que confesarlo que cuando era niña, algunas veces me sentía triste porque nunca me regaló una muñeca, sólo libros, música clásica y cosas de grandes pensaba yo, pero en fin eso hizo que yo fuera quien soy y nunca me cansaré de darle las gracias y de amarlo por ser quien es.
Sin embargo como nada es perfecto, muchas personas me maltrataron psicológicamente, porque me recordaban cruelmente mi humilde y oscura niñez, el que yo "no tenía derecho" y era una atrevida para llamarlo papá, pues yo no tenía ni su sangre ni su apellido, todo el que pudo me lo recordó hasta ser adulta, así pues que con el tiempo dejé de llamarlo papá, para que nadie se atreviera a recordarme la historia de mi vida que yo bien me la sabía de memoria pues era quien la había vivido, además de ser la víctima inocente en las circunstancias de vida de los mayores, yo no tenía la culpa de los errores que los adultos habían cometido, pero lamentablemente muchas personas adultas y otros niños (el famoso "buying") son felices "recordándoles la parte triste de su historia" a los niños y yo fuí una de esas niñas que con el tiempo tuve que aprender a "hacer oídos sordos" a los mensajes negativos que las personas me enviaban, pero eso me marcó amargamente, tuve muchos episodios de tristeza y depresión porque no podía entender el por qué me tenía que haber pasado a mí?, por qué?... me pregunté llorando muchas veces.
Mi papá porque así lo considero, toda la vida me ha brindado su apoyo incondicional, estuvo conmigo no sólo en la construcción de momentos felices, sino aún más en los momentos difíciles, me acompañó en el proceso de criar a mis hijos, ellos todos adoran a su nonito y no tienen un sólo recuerdo triste de vida a su lado, "en fín de cuentas eso es lo que cuenta", además también me quiso dar su apellido, pero yo ya tenía el mío.
Entonces hoy alegremente puedo decir que tengo dos padres y darle las gracias al Amado Padre por este motivo, a los dos los amo y a los dos siempre les he deseado que tengan no sólo un feliz día, sino todos los días de su vida y de paso desearles muchos días felices a otros padres como son mi amado hijo del cual me siento muy orgullosa, pues es un excelente papá, su nonito Julio que fué también un excelente papá, su señor padre, mis cuñados y concuñados, sobrinos, amigos, hermanos de camino entre muchos maravillosos padres que he conocido a lo largo de la vida y recuerden que si quieren estar en el corazón y en la construcción de los dulces recuerdos de sus hijos, deben estar muy presentes y en total entrega en su presente amándolos, respetándolos, valorándolos y acompañándolos en su proceso de construcción de vida.
Hasta la próximaaaaaaaaaa....................
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